La Guardia Costera de los Estados Unidos anunció que ha repatriado a 40 migrantes dominicanos y haitianos después de interceptar su embarcación cuando intentaban llegar a la isla de Mona, una reserva natural ubicada en el oeste de Puerto Rico.
Gerard Wenk, jefe de respuesta del Sector San Juan, emitió una advertencia en la que insta a quienes están pensando en participar en un viaje ilegal a no arriesgar sus vidas en el mar. Los viajes ilegales son extremadamente peligrosos, ya que se realizan en embarcaciones inadecuadas para la navegación y sin equipos de salvamento. Además, si son descubiertos, los migrantes también corren el riesgo de ser procesados y de no poder ingresar legalmente a los Estados Unidos en el futuro.
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Entre los migrantes interceptados había cinco hombres y dos mujeres haitianos, entre ellos una menor, y 31 hombres y dos mujeres dominicanos. La Guardia Costera transfirió a 38 de los migrantes a las autoridades de República Dominicana en Punta Cana el martes, mientras que la menor y su madre fueron transferidas a representantes del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia de República Dominicana.
Desde el 1 de octubre de 2022 hasta el 31 de marzo de 2023, la
Guardia Costera ha llevado a cabo 25 interdicciones de viajes ilegales en aguas cercanas a Puerto Rico. Durante este período, se interceptó a 777 ciudadanos no estadounidenses, incluidos 568 dominicanos, 195 haitianos, 13 venezolanos y uno de nacionalidad desconocida. La isla de Mona se encuentra en el canal homónimo, que separa Puerto Rico de República Dominicana y es una ruta migratoria frecuente.
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