Elecciones presidenciales de 2024 en Venezuela
La exdiputada María Corina Machado ha emergido como la nueva líder indiscutible de la oposición en Venezuela, a pesar de una inhabilitación que le impide participar en las elecciones presidenciales de 2024. Con más de 500,000 votos, ha convencido al país de que esta restricción no la detendrá en su lucha por elecciones libres y transparentes el próximo año, con la esperanza de desplazar a Nicolás Maduro del poder.
Aunque el camino para superar los obstáculos que se presentan no está del todo claro, Machado ha obtenido un amplio respaldo del 93.13% en las urnas en estas elecciones, multiplicando significativamente la cantidad de votos que recibió en su última contienda en las primarias de 2012, donde obtuvo solo el 3.81% de los votos.
María Corina Machado, de 56 años e ingeniera industrial, se ha destacado por su postura radical contra el Gobierno, al que acusa de dictadura. A lo largo de los años, ha enfrentado burlas y acusaciones de "loca" y "traidora a la patria" por parte del chavismo. En 2014, fue expulsada del Parlamento después de denunciar la represión gubernamental en protestas como embajadora alterna de Panamá ante la Organización de Estados Americanos (OEA).
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En el año siguiente, enfrentó dos medidas destinadas a sacarla de la política: una prohibición de salida del país que ha durado ocho años sin ser condenada por ningún delito y una inhabilitación administrativa que le impidió ocupar cargos de elección popular durante un año. En julio del año pasado, la Contraloría anunció que su veto se extenderá hasta 2030.
A lo largo de casi una década, María Corina Machado ha recorrido incansablemente Venezuela, sumando seguidores poco a poco hasta convertirse en un fenómeno electoral. Su encierro solo sirvió para fortalecerla.
Sin embargo, el título de líder indiscutible de la oposición le ha sido esquivo durante mucho tiempo. Durante años, estuvo en segundo plano detrás de figuras como Henrique Capriles, Leopoldo López y Juan Guaidó, quienes ahora son criticados por la base antichavista por haber negociado con el Gobierno. En cambio, Machado es vista como una figura "coherente" por negarse a dialogar con el Gobierno.
La política demostró una infatigable dedicación al promover protestas antigubernamentales entre 2013 y 2019, incluso cuando parecía que su base de seguidores disminuía. En 2018, instó a sus pocos seguidores a salir a las calles para exigir la renuncia de Maduro, justo cuando este fue reelegido con la menor participación electoral en este tipo de comicios.
Diez años después de su fracaso al proponer un "capitalismo popular" para Venezuela, María Corina Machado ganó la confianza de los ciudadanos con un plan de privatizaciones masivas que incluye la estatal petrolera Pdvsa, la principal fuente de riqueza del país. Argumenta que es esencial reducir el tamaño del Gobierno y la intervención estatal en asuntos privados para impulsar un gran cambio económico que saque al país de su situación de atraso. A pesar de ocho años de contracción financiera, los indicadores comenzaron a mostrar mejoras leves en 2021.
En la actualidad, María Corina Machado ocupa la cima del dividido panorama opositor, con numerosas facciones que son difíciles de cuantificar. Uno de sus primeros desafíos será reunir la mayor cantidad de apoyos posibles para consolidar su candidatura, lo que solo será posible mediante negociaciones con el Ejecutivo.
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